Medios Libres y Memoria Histórica: Hay que despertar la memoria de cada lucha
“- Una última pregunta, ¿cómo se trabaja la memoria histórica en la lucha?”
Esa pregunta fue hecha al final del camino hace unos días, sin tiempo ya para dialogarla. Este texto intenta ser un principio del diálogo, con la convicción de que quien la formuló seguramente ha estado trabajando el tema y seguirá trabajándolo… y dialogando en colectivo.
1. El olvido
Se lucha, de alguna manera, pero siempre se lucha.
Imagina que te despiertas y no recuerdas quien eres, y así tienes que continuar con la vida cotidiana, haciendo elecciones, tomando decisiones, acertando y ante todo errando (y de paso envuelta o envuelto en un proceso de lucha y resistencia). Hay una cantidad de películas que empiezan así, está por ejemplo esa llamada Memento, donde el protagonista cada día olvida lo del día anterior, y entonces se tatúa instrucciones en el cuerpo para que su vida tenga sentido, así se despierta, se ve al espejo y lo primero que ve son las instrucciones que le dan sentido a su existencia.
Imagina que no es uno o una quienes perdieron su memoria, su identidad, sino que son cientos de millones, o hasta miles de millones, inmensas capas de la población. Imagina que en manos de unos pocos hay gigantescos mecanismos que despojan a la gente de memoria y de identidad y construyen identidades de fachada, como la publicidad comercial y la mercadotecnia, la televisión, los cercos informativos, la escuela y la universidad, la música comercial, el cine, las transnacionales de los alimentos, los gobiernos que apuestan a la desmemoria sistemática, al olvido, etc.
Pero hay quienes se rebelan y luchan, y deciden empezar a construir otra cosa, y hacen ejercicios de la memoria, tratan de acordarse, y encuentran que siempre hay quienes recuerdan, y que los recuerdos y la memoria pueden y empiezan a tejerse en colectivo, y esas luchas, que siempre se emprenden de alguna manera, también se toman la memoria histórica como otra herramienta y trinchera de lucha y de identidad.
2. ¿Para qué sirve la memoria histórica?
Desde ahí ¿para qué puede servir la memoria histórica?
.- Para levantarnos en la mañana y saber para donde caminar.
.- Para saber quienes somos.
.- Para poder mirar el horizonte.
.- Para salir de la jaula de la cotidianidad donde vivimos al día, sin pasado y sin futuro.
.- Para poder pensarnos en colectivo.
.- Para decidir otros caminos distintos a los que los señores del poder quieren imponernos.
.- Para recordar diversos métodos de hacer, decir y construir.
.- Para reconocer los ríos de la historia en las luchas de nuestras abuelas y nuestros abuelos.
.- Para poder tomar agua de los ríos de la historia.
3. ¿Qué es la memoria histórica?
Se lucha, de alguna manera, pero siempre se lucha, la memoria histórica nos puede dar una mejor perspectiva para tomar camino.
Pero la memoria histórica no es un tema de especialistas, sino que en un método de lucha sin especialistas es tarea de todas y todos, recordarla, compartirla y heredarla.
La memoria histórica es una herramienta para analizar las fuerzas de la historia, las del enemigo, pero también las de la resistencia y de construcción de presente y futuro.
Es una inmensa fuente para aprender de los aciertos, pero ante todo de los errores.
Es inspiración para gente de todas las generaciones, estratos sociales, procedencias, grupos, inspiración que nos muestra que la lucha siempre ha sido de todas y todos.
Es un recordatorio permanente de que siempre ha sido posible la construcción de mundo desde abajo, aún en los tiempos de mayor terror y oscuridad.
Es un compilado de estrategia y táctica.
Para saber quienes somos y pensar quienes seremos.
El poder le apuesta a la desmemoria, a la amnesia y al olvido, ahí implanta la semilla de la impunidad. Ahí mismo sembramos la semilla de la memoria que destruirá la impunidad.
La memoria histórica no es una pieza de museo, es materia fluida que se puede usar dinámicamente en los trabajos cotidianos.
4. Despertar la memoria
Caminando por ahí y pensando en este artículo escucho a una compa decir a cuenta de otra discusión:
- Hay que despertar la memoria de cada lucha.
En esta frase muy línea educación popular se resumen universos sobre el trabajo siempre pendiente con la memoria histórica. Y es en sí una respuesta sintética a la pregunta inicial.
Despertar consciencias siempre ha sido uno de los trabajos de quienes luchan, sumar a otras y otros a la lucha, por que los cambios cuando se realizan son de todos y todas y no de unos pocos, y los cambios necesariamente se logran en colectivo, cuando podemos nombrar un nosotros y nosotras suficientemente amplio. A veces hay quienes despiertan y luego se les vuelve a dormir la consciencia sin que se den cuenta, es cuando empiezan los vicios y las actitudes capitalistas, patriarcales, racistas y en general opresoras dentro de la lucha, los retrocesos, por eso es importante no sólo despertar las consciencias, sino también mantenerlas despiertas.
Despertar la memoria de cada lucha entonces no es ya sólo el trabajo de ir despertando personas una por una, sino un despertar en colectivo, que ya no sólo se refiere a despertar una dignidad y su capacidad de rebelión, sino a potenciar la capacidad de rebelión colectiva, donde mirando las raíces se calcula que tan lejos pueden llegar las ramas, y mirando el horizonte en su conjunto se supone que tan lejos pueden ir los pasos.
¿Y esta lucha por un techo digno que memoria tiene que despertar? ¿Y aquella lucha por educación crítica, pública y gratuita? ¿Y esa lucha por mejores condiciones de trabajo? ¿Y la lucha de aquella colectiva de mujeres? ¿Y esa lucha contra aquel megaproyecto? ¿Y las luchas por libertad y justicia? ¿Y las luchas de los pueblos indígenas? ¿Y las luchas aparentemente muy chiquitas y las aparentemente muy grandes?
5. ¿Cómo se trabaja la memoria?
¿Cómo se trabaja la memoria histórica en el movimiento social? O ¿Cómo se despierta la memoria histórica de la lucha y se la mantiene despierta?
.- Con líneas del tiempo colectivas, que se elaboran de vez en cuando al definir planes colectivos o durante encuentros.
.- Con libros de historia vivos (que no se escriben) y en papel (pueden también ser folletos), que se reviven en asambleas comunitarias de cuando en cuando, como las y los guardianes de la memoria que una vez al año reunían a la comunidad para recordar los orígenes de determinada comunidad.
.- Con obras de teatro, murales, canciones, cuentos, poemas, novelas y gráfica.
.- Citando en los pasos la memoria de abuelos y abuelas. No como otro santoral, sino como huellas que van quedando en el paisaje e inspiración para nuevos pasos.
.- Como antecedentes en los documentos de colectivos y organizaciones.
.- Como parte cotidiana de los contextos de los análisis de coyuntura.
.- Como parte de la definición de los No, los Si y los Cómo.
.- Como emulación, ejemplo, para reproducir los nuevos mundos, que como tradición ya tenemos un tiempo construyendo, contra los mundos ominosos, que los de arriba siempre han querido imponernos.
6. La fuerza de la memoria
Las memorias en lo general son fuerza para:
.- Las mujeres rebeldes, sabiendo que siempre hubo mujeres en rebeldía, y que en algunas épocas se avanzó mucho más de lo avanzado hoy.
.- Las y jóvenes estudiantes, sabiendo que la dignidad siempre se ha crecido en las escuelas, se ha organizado luchando y obteniendo sucesivas victorias.
.- Los pueblos indígenas reconociéndose en siglos de rebeldía, desde el orgullo de ser indígenas.
.- Las trabajadoras y trabajadores, que se reconocen en siglos de resistencia, cuando en tiempos más ominosos que los actuales pudieron incluso conquistar derechos.
.- Las comunidades que resisten contra megaproyectos recordando cómo las abuelas y abuelos resistieron contra procesos similares en el pasado.
.- Las y los artistas y trabajadores de la cultura, que trabajan en la educación popular y la comunicación popular, sabiendo que siempre hubo quienes trabajaron con el arte, la cultura y la palabra y los usaron como herramienta de construcción de presente y dispositivos de construcción de futuro.
7. Memoria histórica e historia oficial
Si, siempre se puede ser nihilista, y rebelarse también desde la nada, pasa en tiempos donde la memoria ha sido bastante devastada.
Curioso, pero no sirve de mucho partir de los libros de historia oficial. Son los recuerdos de la gente, los ejercicios de memoria histórica y las líneas del tiempo y libros que se escriben desde las luchas los que más pueden apoyar a la toma de la memoria histórica como herramienta y trinchera.
Por que la memoria histórica tiene una lógica interna distinta a la historia administrativa y universitaria que regularmente son herramientas de dominación y no de liberación.
Lo que quiere decir que trabajar con la memoria histórica es mucho más trabajo que simplemente abrir un libro de historia escrito desde las instituciones del enemigo.
¿Cuánta historia no ha sido rasurada y sistemáticamente olvidada por la historia escrita desde las universidades?
8. Preguntas
Finalmente unas preguntas, por que unas preguntas abren otras preguntas, y cuando se pregunta por método bastantes pasos se van dando, en colectivo, por que a una pregunta siempre sigue un diálogo:
- ¿Qué movimientos históricos partieron de la recuperación de la memoria histórica?
- ¿Qué procesos actuales de lucha han partido de la memoria histórica?
- ¿Qué organizaciones locales, nacionales y extranjeras impulsan trabajos con la memoria histórica?