martes, 31 de agosto de 2010

Soy el responsable de la persecución a homosexuales que hubo en Cuba: Fidel Castro

El bloqueo, vigente y con el agravante de que es ley en EU, dice

Explica sobre la homofobia de hace cinco décadas: "... teníamos tantos problemas de vida o muerte que no le prestamos atención... piensa cómo eran nuestros días en aquellos primeros meses de la Revolución: la guerra con los yanquis, el asunto de las armas, los planes de atentados contra mi persona..."

"La lucha, la batalla que tuvimos que dar, nos llevó a hacer esfuerzos superiores a los que tal vez habríamos hecho sin bloqueo", dice el comandante de la Revolución cubana, Fidel Castro, en la entrevista.
Carmen Lira Saade

Periódico La Jornada
Martes 31 de agosto de 2010, p. 26

La Habana. Aunque no hay nada que denote en él malestar alguno, creo que a Fidel no le va a gustar lo que voy a decirle:

–Comandante, todo el encanto de la Revolución Cubana, el reconocimiento, la solidaridad de una buena parte de la intelectualidad universal, los grandes logros del pueblo frente al bloqueo, en fin, todo, todo se fue al caño por causa de la persecución a homosexuales en Cuba.

Fidel no rehuye el tema. Ni niega ni rechaza la aseveración. Sólo pide tiempo para recordar, dice, cómo y cuándo se desató el prejuicio en las filas revolucionarias.

Hace cinco décadas, y a causa de la homofobia, se marginó a los homosexuales en Cuba y a muchos se les envió a campos de trabajo militar-agrícola, acusándolos de "contrarrevolucionarios".

–Sí –recuerda–, fueron momentos de una gran injusticia, ¡una gran injusticia! –repite enfático–, la haya hecho quien sea. Si la hicimos nosotros, nosotros… Estoy tratando de delimitar mi responsabilidad en todo eso porque, desde luego, personalmente, yo no tengo ese tipo de prejuicios.

Se sabe que entre sus mejores y más antiguos amigos hay homosexuales.

–Pero, entonces, ¿cómo se conformó ese odio al "diferente"?

Él piensa que todo se fue produciendo como una reacción espontánea en las filas revolucionarias, que venía de las tradiciones. En la Cuba anterior no sólo se discriminaba a los negros: también se discriminaba a las mujeres y, desde luego, a los homosexuales…

–Sí, sí. Pero no en la Cuba de la "nueva" moral, de la que tan orgullosos estaban los revolucionarios de dentro y de fuera...

–¿Quién fue, por tanto, el responsable, directo o indirecto, de que no se pusiera un alto a lo que estaba sucediendo en la sociedad cubana? ¿El Partido? Porque ésta es la hora en que el Partido Comunista de Cuba no "explicita" en sus estatutos la prohibición a discriminar por orientación sexual.

–No –dice Fidel–. Si alguien es responsable, soy yo…

“Es cierto que en esos momentos no me podía ocupar de ese asunto… Me encontraba inmerso, principalmente, de la Crisis de Octubre, de la guerra, de las cuestiones políticas…”

–Pero esto se convirtió en un serio y grave problema político, comandante.

–Comprendo, comprendo... Nosotros no lo supimos valorar... sabotajes sistemáticos, ataques armados, se sucedían todo el tiempo: teníamos tantos y tan terribles problemas, problemas de vida o muerte, ¿sabes?, que no le prestamos suficiente atención.

–Después de todo aquello, se hizo muy difícil la defensa de la Revolución en el exterior… La imagen se había deteriorado para siempre en algunos sectores, sobre todo de Europa.

–Comprendo, comprendo –repite–: era justo...

–La persecución a homosexuales podía darse con menor o mayor protesta, en cualquier parte. No en la Cuba revolucionaria –le digo.

–Comprendo: es como cuando el santo peca, ¿verdad?… No es lo mismo que peque el pecador, ¿no?

Fidel esboza una tenue sonrisa, para luego volver a ponerse serio:

–Mira: piensa tú cómo eran los días nuestros en aquellos primeros meses de la Revolución: la guerra con los yanquis, el asunto de las armas y, casi simultáneamente a ellos, los planes de atentados contra mi persona…

Fidel revela lo "tremendamente" que influyeron en él y lo que alteraron su vida las amenazas de atentados y los atentados mismos de que fue víctima:

“No podía estar en ninguna parte, no tenía ni dónde vivir…” Las traiciones estaban a la orden del día, y él tenía que andar a salto de mata…

“Escapar a la CIA, que compraba tantos traidores, a veces entre la misma gente de uno, no era cosa sencilla; pero en fin, de todas maneras, si hay que asumir responsabilidad, asumo la mía. Yo no voy a echarle la culpa a otros…”, sostiene el dirigente revolucionario.

Sólo lamenta no haber corregido entonces…

Hoy, sin embargo, el problema se está enfrentando:

Bajo el lema "La homosexualidad no es un peligro, la homofobia sí", se celebró recientemente en muchas ciudades del país la tercera Jornada Cubana por el Día Mundial Contra la Homofobia. Gerardo Arreola, corresponsal de La Jornada en Cuba, da cuenta puntual del debate y la lucha que se lleva adelante en la isla por el respeto a los derechos de las minorías sexuales.

Arreola refiere que es Mariela Castro, una socióloga de 47 años –hija del presidente cubano Raúl Castro–, quien lidera el Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex), institución que –dice ella– ha conseguido mejorar la imagen de Cuba después de la marginación de los años 60.

"Aquí estamos las cubanas y los cubanos, para seguir luchando por la inclusión, para que ésta sea la lucha por todas y todos, por el bien de todas y todos", dijo Mariela Castro al inaugurar la jornada, escoltada por transexuales que sostenían una bandera cubana y otra multicolor del movimiento gay.

Hoy en Cuba, los esfuerzos por los homosexuales incluyen iniciativas como cambio de identidad de transexuales o las uniones de civiles entre personas del mismo sexo.

Desde los años 90, la homosexualidad en la isla está despenalizada, aunque no deja de haber del todo casos de asedio policiaco. Y desde 2008 se practican operaciones gratuitas de cambio de sexo.

El bloqueo

En 1962 Estados Unidos decretó el bloqueo contra Cuba. Se trató de "una feroz tentativa de genocidio"… como le ha llamado Gabriel García Márquez, el escritor que mejor ha cronicado el periodo.

–Periodo que dura hasta nuestros días –me advierte Fidel.

“El bloqueo está vigente hoy más que nunca, y con el agravante, en estos momentos, de que es ley constitucional en Estados Unidos, por el hecho de que la vota el presidente, la vota el Senado, la vota la Cámara de Representantes…”

El número de votos y su aplicación pueden aliviar considerablemente, o no, la situación. Pero ahí está…

–Sí, ahí está la ley Helms-Burton, injerencista y anexionista… y la ley Torricelli, debidamente aprobadas por el Congreso de Estados Unidos.

Recuerdo bien al senador Helms el día de 1996 en que le fue aprobada su iniciativa. Estaba exultante y repetía ante los periodistas lo central de sus pretensiones:

“Castro se tiene que ir de Cuba. No me importa cómo Castro deje el país: si es en forma vertical, o en forma horizontal, eso es asunto de ellos… Pero Castro debe dejar Cuba.”

Comienza el cerco

“En 1962, cuando Estados Unidos decretó el bloqueo, Cuba se encontró de pronto con la evidencia de que no tenía nada más que seis millones de cubanos resueltos, en una isla luminosa y desguarnecida…”

Nadie, ningún país, podía comerciar con Cuba; con nadie se podía comprar o vender, ¡ay de aquel país o empresa! que no se sujetara al asedio comercial decretado por Estados Unidos. Siempre me llamó la atención aquel barco de la CIA que patrulló las aguas territoriales hasta hace unos pocos años, para interceptar los barcos que llevaran mercancías a la isla.

El problema mayor, sin embargo, fue siempre el de las medicinas y los alimentos, que se mantiene hasta nuestros días. Todavía hoy no se permite a ninguna empresa alimentaria comerciar con Cuba, ni siquiera por la importancia de los volúmenes que la isla adquiriría o porque ésta siempre está obligada a pagar por adelantado.

Condenados a morir de hambre, los cubanos tuvieron que "inventar la vida otra vez desde el principio", dice García Márquez.

Desarrollaron una "tecnología de la necesidad" y una "economía de la escasez", relata: toda una "cultura de la soledad".

No hay gesto de pesar, menos de amargura, cuando Fidel Castro admite el abandono en que dejó a la isla gran parte del mundo. Al contrario…

–La lucha, la batalla que tuvimos que dar nos llevó a hacer esfuerzos superiores a los que tal vez habríamos hecho sin bloqueo –dice Fidel.

Recuerda con una suerte de orgullo, por ejemplo, la gigantesca operación de masas que llevaron adelante cinco millones de muchachos, agrupados en los CDR. Tan sólo en una jornada de ocho horas lograron una vacunación masiva en todo el país, con la que erradicaron enfermedades como la polio o el paludismo.

O cuando más de un cuarto de millón de alfabetizadores –cien mil de ellos niños se echó a cuestas la alfabetización de la mayor parte de la población adulta del país que no sabía leer ni escribir.

Pero el "gran salto" se da, sin duda, en la medicina y en la biotecnología:

–Se habla de que Fidel mismo mandó a formar en Finlandia a un equipo de científicos y médicos que habrían de encargarse de la producción de medicamentos.

–El enemigo usó contra nosotros la guerra bacteriológica. “Trajo aquí el virus II del Dengue. En la Cuba pre revolucionaria no se conocía ni el I. Aquí nos apareció el II, que es mucho más peligroso porque produce un dengue hemorrágico que ataca sobre todo a los niños.

“Entró por Boyeros. Lo trajeron los contrarrevolucionarios, esos mismos que andaban con Posada Carriles, esos mismos que indultó Bush, esos mismos que dieron lugar al sabotaje del avión de Barbados… Esa misma gente recibió la tarea de introducir el virus”, denuncia Fidel.

–Culpaban a Cuba porque, decían, había mucho mosquito en la Isla –le digo.

–¿Cómo no iba a haberlos si para combatirlos hace falta el abate, y el abate no lo podíamos obtener: nada más lo producían en Estados Unidos? –revela.

El rostro del comandante se ensombrece:

"Se nos empezaron a morir los niños", recuerda. “No teníamos con qué atacar la enfermedad. Nadie nos quería vender las medicinas y los equipos con los que se erradica el virus. Ciento cincuenta personas murieron víctimas de la enfermedad. Casi todos eran niños…

"Tuvimos que acudir a las compras por contrabando, aunque era carísimo. Dondequiera prohibieron hasta traerlo. Una vez, por misericordia, dejaron traer un poco."

Por "misericordia", ha dicho el hombre fuerte de la Revolución. Confieso mi turbación…

No precisamente por misericordia, sino por solidaridad, acudieron algunos amigos de Cuba. Fidel menciona, por México, a los Echeverría: Luis y María Esther que, aunque ya no estaban en el gobierno, pudieron conseguir algunos equipos que permitieron paliar de alguna forma la epidemia.

–No los olvidaremos nunca –dice conmovido.

–¿Ya ve? –le digo. No todo han sido malas o desafortunadas relaciones con personajes del poder mexicano…

–Desde luego que no –dice antes de que concluyamos la plática-entrevista y pasemos al almuerzo que compartimos con su esposa, Dalia Soto del Valle.

Desde esa terraza sideral donde se coloca para mirar y analizar el mundo, la vida… Fidel hace un brindis por que "en el mundo del futuro tengamos una sola Patria".

“¿Qué es eso de que unos son españoles, otros ingleses, otros africanos? ¿Y que unos tienen más que otros…?

“El mundo del futuro tiene que ser común, y los derechos de los seres humanos tienen que estar por encima de los derechos individuales… Y va a ser un mundo rico, donde los derechos sean igualitos para todos…”

–¿Cómo se va a conseguir eso, comandante?

–Educando… educando y creando amor y confianza.

Cifras alegres

lunes, 30 de agosto de 2010

Peras al olmo

"Llegué a estar muerto, pero resucité", entrevista a Fidel Castro

"Hay que persuadir a Obama de que evite la guera nuclear"

"No quiero estar ausente en estos días. El mundo está en la fase más interesante y peligrosa de su existencia y yo estoy bastante comprometido con lo que vaya a pasar. Tengo cosas que hacer todavía"
Carmen Lira Saade

Periódico La Jornada
Lunes 30 de agosto de 2010, p. 2

La Habana. Estuvo cuatro años debatiéndose entre la vida y la muerte. En un entrar y salir del quirófano, entubado, recibiendo alimentos a través de venas y catéteres y con pérdidas frecuentes del conocimiento…

"Mi enfermedad no es ningún secreto de Estado", habría dicho poco antes de que ésta hiciera crisis y lo obligara a "hacer lo que tenía que hacer": delegar sus funciones como presidente del Consejo de Estado y, consecuentemente, como comandante en jefe de las fuerzas armadas de Cuba.

"No puedo seguir más", admitió entonces –según revela en ésta su primera entrevista con un medio impreso extranjero desde entonces–. Hizo el traspaso del mando, y se entregó a los médicos.

La conmoción sacudió a la nación entera, a los amigos de otras partes; hizo abrigar esperanzas revanchistas a sus detractores, y puso en estado de alerta al poderoso vecino del norte. Era el 31 de julio de 2006 cuando dio a conocer, de manera oficial, la carta de renuncia del máximo líder de la Revolución cubana.

Lo que no consiguió en 50 años su enemigo más feroz (bloqueos, guerras, atentados ) lo alcanzó una enfermedad sobre la que nadie sabía nada y se especulaba todo. Una enfermedad que al régimen, lo aceptara o no, iba a convertírsele en "secreto de Estado".

(Pienso en Raúl, en el Raúl Castro de aquellos momentos. No era sólo el paquete que le habían confiado casi de buenas a primeras, aunque estuviera acordado de siempre; era la delicada salud de su compañera Vilma Espín –quien poco después fallecería víctima de cáncer–, y la muy probable desaparición de su hermano mayor y jefe único en lo militar, en lo político, en lo familiar.)

Hoy hace 40 días Fidel Castro reapareció en público de manera definitiva, al menos sin peligro aparente de recaída. En un clima distendido y cuando todo hace pensar que la tormenta ha pasado, el hombre más importante de la Revolución cubana luce rozagante y vital, aunque no domine del todo los movimientos de sus piernas.

Durante alrededor de cinco horas que duró la charla-entrevista –incluido el almuerzo– con La Jornada, Fidel aborda los más diversos temas, aunque se obsesione con algunos en particular. Permite que se le pregunte de todo –aunque el que más interrogue sea él– y repasa por primera vez y con dolorosa franqueza algunos momentos de la crisis de salud que sufrió los pasados cuatro años.

"Llegué a estar muerto", revela con una tranquilidad pasmosa. No menciona por su nombre la divertículis que padeció ni se refiere a las hemorragias que llevaron a los especialistas de su equipo médico a intervenirlo en varias o muchas ocasiones, con riesgo de perder la vida en cada una.

Pero en lo que sí se explaya es en el relato del sufrimiento vivido. Y no muestra inhibición alguna en calificar la dolorosa etapa como un "calvario".

"Yo ya no aspiraba a vivir, ni mucho menos... Me pregunté varias veces si esa gente (sus médicos) iban a dejarme vivir en esas condiciones o me iban a permitir morir... Luego sobreviví, pero en muy malas condiciones físicas. Llegué a pesar cincuenta y pico de kilogramos."

"Sesenta y seis kilogramos", precisa Dalia, su inseparable compañera que asiste a la charla. Sólo ella, dos de sus médicos y otros dos de sus más cercanos colaboradores están presentes.

–Imagínate: un tipo de mi estatura pesando 66 kilos. Hoy alcanzo ya entre 85 y 86 kilos, y esta mañana logré dar 600 pasos solo, sin bastón, sin ayuda.

"Quiero decirte que estás ante una especie de re-su-ci-ta-do", subraya con cierto orgullo. Sabe que además del magnífico equipo médico que lo asistió en todos estos años, con el que se puso a prueba la calidad de la medicina cubana, ha contado su voluntad y esa disciplina de acero que se impone siempre que se empeña en algo.

–No cometo nunca la más mínima violación –asegura–. De más está decir que me he vuelto médico con la cooperación de los médicos. Con ellos discuto, pregunto (pregunta mucho), aprendo (y obedece)...

Conoce muy bien las razones de sus accidentes y caídas, aunque insiste en que no necesariamente unas llevan a las otras. "La primera vez fue porque no hice el calentamiento debido, antes de jugar basquetbol." Luego vino lo de Santa Clara: Fidel bajaba de la estatua del Che, donde había presidido un homenaje, y cayó de cabeza. "Ahí influyó que los que lo cuidan a uno también se van poniendo viejos, pierden facultades y no se ocuparon", aclara.

Sigue la caída de Holguín, también cuan grande es. Todos estos accidentes antes de que la otra enfermedad hiciera crisis y lo dejara por largo tiempo en el hospital.

"Tendido en aquella cama, sólo miraba a mi alrededor, ignorante de todos esos aparatos. No sabía cuánto tiempo iba a durar ese tormento y de lo único que tenía esperanza es de que se parara el mundo", seguro para no perderse de nada. "Pero resucité", dice ufano.

–Y cuando resucitó, comandante, ¿con qué se encontró? –le pregunto.

–Con un mundo como de locos... Un mundo que aparece todos los días en la televisión, en los periodicos, y que no hay quien entienda, pero el que no me hubiera querido perder por nada del mundo –sonríe divertido.

Con una energía sorprendente en un ser humano que viene levantándose de la tumba –como él dice– y con la mismísima curiosidad intelectual de antes, Fidel Castro se pone al día.

Dicen, los que lo conocen bien, que no hay un proyecto, colosal o milimétrico, en el que no se empeñe con una pasión encarnizada y que en especial lo hace si tiene que enfrentarse a la adversidad, como había sido y era el caso.

"Nunca como entonces parece de mejor humor." Alguien que cree conocerlo bien le dijo: "las cosas deben andar muy mal, porque usted está rozagante".

La tarea de acumulación informativa cotidiana de este sobreviviente comienza desde que despierta. A una velocidad de lectura que nadie sabe con qué método consigue, devora libros; se lee entre 200 y 300 cables informativos por día; está pendiente y al momento de las nuevas tecnologías de la comunicación; se fascina con Wikileaks, "la garganta profunda del Internet", famosa por la filtración de más de 90 mil documentos militares sobre Afganistán, en los que este nuevo "navegante" está trabajando.

–¿Te das cuenta, compañera, de lo que esto significa? –me dice–. Internet ha puesto en manos de nosotros la posibilidad de comunicarnos con el mundo. Con nada de esto contábamos antes –comenta, al tiempo que se deleita viendo y seleccionando cables y textos bajados de la red, que tiene sobre el escritorio: un pequeño mueble, demasiado pequeño para la talla (aun disminuida por la enfermedad) de su ocupante.

–Se acabaron los secretos, o al menos eso pareciera. Estamos ante un "periodismo de investigación de alta tecnología", como lo llama el New York Times, y al alcance de todo el mundo.

–Estamos ante el arma más poderosa que haya existido, que es la comunicación –ataja–. El poder de la comunicación ha estado, y está, en manos del imperio y de ambiciosos grupos privados que hicieron uso y abuso de él. Por eso los medios han fabricado el poder que hoy ostentan.

Lo escucho y no puedo menos que pensar en Chomsky: cualquiera de las trapacerías que el imperio intente debe contar antes con el apoyo de los medios, principalmente periódicos y televisión, y hoy, naturalmente, con todos los instrumentos que ofrece la Internet.

Son los medios los que antes de cualquier acción crean el concenso. "Tienden la cama", diríamos... Acondicionan el teatro de operaciones.

Sin embargo, acota Fidel, aunque han pretendido conservar intacto ese poder, no han podido. Lo están perdiendo día con día. En tanto que otros, muchos, muchísimos, emergen a cada momento…

Se hace entonces un reconocimiento a los esfuerzos de algunos sitios y medios, además de Wikileaks: por el lado latinoamericano, a Telesur de Venezuela, a la televisión cultural de Argentina, el Canal Encuentro, y a todos aquellos medios, públicos o privados, que enfrentan a poderosos consorcios particulares de la región y a trasnacionales de la información, la cultura y el entretenimiento.
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Informes sobre la manipulación de los poderosos grupos empresariales locales o regionales, sus complots para entronizar o eliminar gobiernos o personajes de la política, o sobre la "tiranía" que ejerce el "imperio" a través de las trasnacionales, están ahora al alcance de todos los mortales.

Pero no de Cuba, que apenas dispone de una entrada de Internet para todo el país, comparable a la que tiene cualquier hotel Hilton o Sheraton.

Ésa es la razón por la que conectarse en Cuba es desesperante. La navegación es como si se hiciera en cámara lenta.

–¿Por qué es todo esto? –pegunto.

–Por la negativa rotunda de Estados Unidos a darle acceso a lnternet a la isla, a través de uno de los cables submarinos de fibra óptica que pasan cerca de las costas. Cuba se ve obligada, en cambio, a bajar la señal de un satélite, lo que encarece mucho más el servicio que el gobierno cubano ha de pagar, e impide disponer de un mayor ancho de banda que permita dar acceso a muchos más usuarios y a la velocidad que es normal en todo el mundo, con la banda ancha.

Por estas razones el gobierno cubano da prioridad para conectarse no a quienes pueden pagar por el costo del servicio, sino a quienes más lo necesitan, como médicos, académicos, periodistas, profesionistas, "cuadros" del gobierno y clubes de Internet de uso social. No se puede más.

Pienso en los descomunales esfuerzos del sitio cubano Cubadebate para alimentar al interior y llevar hacia el exterior la información del país, en las condiciones existentes. Pero, según Fidel, Cuba podrá solucionar pronto esta situación.

Se refiere a la conclusión de las obras de cable submarino que se tiende del puerto de La Guaira, en Venezuela, hasta las cercanías de Santiago de Cuba. Con estas obras, llevadas adelante por el gobierno de Hugo Chávez, la isla podrá disponer de banda ancha y posibilidades de acometer una gran ampliación del servicio.

–Muchas veces se ha señalado a Cuba, y en particular a usted, de mantener una posición antiestadunidense a rajatabla, y hasta han llegado a acusarlo de guardar odio hacia esa nación –le digo.

—Nada de eso –aclara–. ¿Por qué odiar a Estados Unidos, si es sólo un producto de la historia?

Pero, en efecto: hace apenas como 40 días, cuando todavía no había terminado de "resucitar" se ocupó –para variar–, en sus nuevas Reflexiones, de su poderoso vecino.

“Es que empecé a ver bien clarito los problemas de la tiranía mundial creciente… –y se le presentó, a la luz de toda la información que manejaba, la "inminencia de un ataque nuclear que desataría la conflagración mundial."

Todavía no podía salir a hablar, a hacer lo que está haciendo ahora, me indica. Apenas podía escribir con cierta fluidez, pues no sólo tuvo que aprender a caminar, sino también, a sus 84 años, debió volver a aprender a escribir..

“Salí del hospital, fui para la casa, pero caminé, me excedí. Luego tuve que hacer rehabilitación de los pies. Para entonces ya lograba comenzar de nuevo a escribir.

"El salto cualitativo se dio cuando pude dominar todos los elementos que me permitían hacer posible todo lo que estoy haciendo ahora. Pero puedo y debo mejorar... Puedo llegar a caminar bien. Hoy, ya te dije, caminé 600 pasos solo, sin bastón, sin nada, y esto lo debo conciliar con lo que subo y bajo, con las horas que duermo, con el trabajo."

–¿Qué hay detrás de este frenesí en el trabajo, que más que a una rehabilitación puede conducirlo a una recaída?

Fidel se concentra, cierra los ojos como para empezar un sueño, pero no... vuelve a la carga:

"No quiero estar ausente en estos días. El mundo está en la fase más interesante y peligrosa de su existencia y yo estoy bastante comprometido con lo que vaya a pasar. Tengo cosas que hacer todavía."

¿Cómo cuáles?

–Como la conformación de todo un movimiento antiguerra nuclear –es a lo que viene dedicándose desde su reaparición.

"Crear una fuerza de persuasión internacional para evitar que esa amenaza colosal se cumpla" representa todo un reto, y Fidel nunca ha podido resistirse a los retos.

“Al principio yo pensé que el ataque nuclear iba a darse sobre Corea del Norte, pero pronto rectifiqué porque me dije que ése lo paraba China con su veto en el Consejo de Seguridad...

"Pero lo de Irán no lo para nadie, porque no hay veto ni chino ni ruso. Luego vino la resolución (de Naciones Unidas), y aunque vetaron Brasil y Turquía, Líbano no lo hizo y entonces se tomó la decisión."

Fidel convoca a científicos, economistas, comunicadores, etcétera, a que den su opinión sobre cuál puede ser el mecanismo mediante el cual se va a desatar el horror, y la forma en que puede evitarse. Hasta a ejercicios de ciencia ficción los ha llevado.

"¡Piensen, piensen!", anima en las discusiones. "Razonen, imaginen", exclama el entusiasta maestro en que se ha convertido en estos días.

No todo el mundo ha comprendido su inquietud. No son pocos los que han visto catastrofismo y hasta delirio en su nueva campaña. A todo esto habría que agregar el temor que a muchos asalta, de que su salud sufra una recaída.

Fidel no ceja: nada ni nadie es capaz de frenarlo siquiera. Él necesita, a la mayor brevedad, CONVENCER para así DETENER la conflagración nuclear que –insiste– amenaza con desaparecer a una buena parte de la humanidad. "Tenemos que movilizar al mundo para persuadir a Barack Obama, presidente de Estados Unidos, de que evite la guerra nuclear. Él es el único que puede, o no, oprimir el botón."

Con los datos que ya maneja como un experto, y los documentos que avalan sus dichos, Fidel cuestiona y hace una exposición escalofriante:

–¿Tú sabes el poder nuclear que tienen unos cuantos países del mundo en la actualidad, comparado con el de la época de Hiroshima y Nagazaki?

"Cuatrocientas setenta mil veces el poder explosivo que tenía cualquiera de las dos bombas que Estados Unidos arrojó sobre esas dos ciudades japonesas. ¡Cuatrocientas setenta mil veces más!", subraya escandalizado.

Esa es la potencia que tiene cada una de las más de 20 mil armas nucleares que –se calcula– hay hoy día en el mundo.

Con mucho menos de esa potencia –con tan sólo 100– ya se puede producir un invierno nuclear que oscurezca el mundo en su totalidad.

Esta barbaridad puede producirse en cosa de unas días, para ser más precisos, el 9 de septiembre próximo, que es cuando vencen los 90 días otorgados por el Consejo de Seguridad de la ONU para comenzar a inspeccionar los barcos de Irán.

–¿Tú crees que los iraníes van a retroceder? ¿Tú te los imaginas? Hombres valientes, religiosos que ven en la muerte casi un premio... Bien, los iraníes no van a ceder, eso es seguro. ¿Van a ceder los yanquis? Y, ¿qué va a pasar si ni uno ni otro ceden? Y esto puede ocurrir el próximo 9 de septiembre.

"Un minuto después de la explosión, más de la mitad de los seres humanos habrán muerto, el polvo y el humo de los continentes en llamas derrotarán a la luz solar, y las tinieblas absolutas volverán a reinar en el mundo", escribió Gabriel García Máquez con ocasión del 41 aniversario de Hiroshima. "Un invierno de lluvias anaranjadas y huracanes helados invertirán el tiempo de los océanos y voltearán el curso de los ríos, cuyos peces habrán muerto de sed en las aguas ardientes... La era del rock y de los corazones trasplantados estará de regreso a su infancia glacial..."

http://www.jornada.unam.mx/2010/08/30/index.php?section=politica&article=002e1pol

sábado, 28 de agosto de 2010

Bienvenidos al infierno *

Julio Scherer García

En nuestra frontera sur y camino a los Estados Unidos, un aire envenenado traslada la memoria a escenarios propios de los campos de concentración. Testimonios inapelables de los migrantes centroamericanos y aun sudamericanos dan cuenta de la tragedia.

De septiembre del 2008 a febrero del 2009, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos registró ciento noventa y ocho casos que incluyen nueve mil setecientos cincuenta y ocho secuestros. La cifra podría llegar a veinte mil al año. A los migrantes los explotan las bandas de los Zetas, los Maras, los polleros. Cierran el cerco los policías municipales, los estatales, los patrulleros y un avispero de malhechores protegidos por placas y disfrazados con las ropas y los modos del poder.

Las casas de seguridad son tugurios, y la comida, tortillas frijoles y arroz una vez al día, si acaso, es pestilente. Nadie podría decir cuántas mujeres son lanzadas a la sodomía, vendidas a quien pague por ellas.

Mauricio Farah Gebara, quinto visitador general de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, y Alejandro Hernández García, su colaborador, me facilitaron el acceso a los testimonios videograbados que dan cuenta de este inmenso horror:

Dos hermanos hondureños arribaron a la terminal de camiones en Tapachula. El sujeto que los conducía los recomendó con dos, a los que les dijo que había que darles una tarifa especial.

A golpes, junto con veinte personas más, los hermanos fueron trasladados a Arriaga. Ahí los subieron a un vagón de tren, y cuando éste se puso en marcha, tres tipos con apariencia de migrantes sacaron sus armas.

Llegando a San Luis condujeron al grupo a bordo de camionetas, por una brecha hasta un rancho, en el que había cincuenta migrantes más y muchos hombres armados. Éstos les dijeron que sólo mediante el pago de 2 mil 500 dólares saldrían de ahí.

“Me pusieron una pistola en la sien y me obligaron a hablar con mis familiares”, dijo uno de los hermanos. “Después de la llamada, todo se puso muy feo. Nos golpeaban y nos hacían arrodillarnos por horas, nos desnudaban por las noches, dormíamos en el piso. Un día nos dijeron que habían matado al Morado, un compañero que no pagaba. Ya no lo volvimos a ver”.

*****

Un salvadoreño relata que para abordar el tren carguero había que pagar 300 pesos al maquinista. “El vagón iba lleno, casi no se podía respirar. Íbamos de pie y a veces nos pisábamos, pero nadie peleaba. Cuando el tren se detuvo, fuimos obligados a bajar. Hombres armados y encapuchados vigilaban un descenso ordenado. Preguntaban si teníamos parientes en los Estados Unidos. La mayoría contestó que sí. A ellos los volvieron a subir al vagón. Los demás fueron abandonados en campo abierto.

“Nos llevaron a un galpón. Fui elegido al azar, me recibieron a palos, como advertencia para los demás. Ahí me comunicaron con mis tíos de San Antonio. Al hacer las llamadas me golpeaban para que ellos escucharan. Les pedían 3 mil dólares. En tanto los mandaban yo tenía que limpiar un patio inmundo. Era el lugar para que hiciéramos nuestras necesidades. Me daban una cubeta y una escoba, pero la suciedad no se iba. Nada más la amontonaba en la alcantarilla”.

Levantado en Tierra Blanca con doce migrantes más, un colombiano fue vendado de los ojos, atado, amordazado y arrojado a punta de pistola en una camioneta roja.

“Sentí mucho miedo, pues oía las golpizas que propinaban a mis compañeros que se quejaban. Llegó mi turno. Sangrábamos mientras escuchábamos que nada éramos, jodidos, quién se preocuparía por nosotros.

“En el piso inundado de una casa, jalaron hacia el frente a un niño de doce años. Golpearon su cuerpo frágil con una tabla hasta que el niño perdió el conocimiento.

Así los vamos a madrear a todos. Así que convenzan a sus carnales para que nos depositen los 2 mil 500 verdes en chinga”.

Un grupo formado por una joven, su hermano, su primo y un amigo de los tres, fue levantado junto a las vías de tren de Ixtepec, Oaxaca. Los condujeron a una bodega en un pueblo que no pudieron identificar.

“Hacía mucho calor. Pasamos dos días sin pan o agua. Al tercero nos ofrecieron un caldo. Éramos muchos”. Se llevaban a algunos y luego los cambiaban por otros hasta que se llevaron a la muchacha:

“Llamaron a mi papá. Yo lloraba porque me apretaban los brazos con fuerza y me pisaban para que mi papá se percatara. Le pidieron un depósito bancario de mil 500 dólares y le dieron un número de cuenta.

“Después llegó el Caimán. Me aseguró que sería su mujer. Por la noche me llevó a un cuarto arrastrándome de los cabellos. Me violó mientras me decía: Yo voy a ser tu papi mientras el cabrón de tu padre me manda el dinero”.

*****

Un niño guatemalteco de trece años relató su secuestro y el de su tío. Sucedió en Balancán, Tabasco. Dormían al aire libre en una zona despoblada, cuando aparecieron los delincuentes con sus promesas de traslado ahora, pago después. Los subieron en un camión de redilas, repleto de migrantes. Viajaron cuatro días hasta llegar a un almacén en Monterrey. Desde ahí se hacían las llamadas.

“A mi tío y otras personas los golpeaban con bates de béisbol en las nalgas por pura diversión. Lo harían a diario hasta que recibieran su pago. A mi tío le pegaron un día en la cabeza. Sangró muchísimo y para su curación sólo me dieron unos trapos sucios. Había unas señoras a las que golpeaban también. Todo el tiempo hablaban de escapar. Las dejaban desnudas. A una la golpearon enfrente de todos porque cerraba las piernas y mordía”.

Un hondureño relató, sin dar detalles, que en Coatzacoalcos, Veracruz, fue detenido pro agentes de migración que lo vendieron a los Zetas.

Los Zetas lo llevaron a un cobertizo, desde donde lo comunicaron con su hermano en Illionis. En tanto llegaba el dinero, le ponían una pistola en la sien y jalaban el gatillo. Ignoraba si el arma estaba cargada.

Lo dejaron en libertad, garantizado el pago, tras practicar sexo oral al secuestrador.

*****

Una menor, nacional de Honduras, fue secuestrada en compañía de ciento treinta personas. Esposados, eran golpeados con gruesas cadenas y amenazados con armas de fuego. Su papá vomitaba sangre y se desmayaba después de las golpizas.

El rescate solicitado para este grupo de personas fue de 900 dólares. Como muchos de sus familiares no pudieron cubrirlos, los mantenían en cautiverio durante tres meses. Luego, a los que permanecieran vivos, los dejaban en libertad.

Otro hondureño narró su secuestro junto con ochenta migrantes. Se los llevó un grupo de siete sujetos armados que se hicieron pasar por coyotes. Los condujeron hasta Reynosa en un camión de redilas escoltado por una patrulla. Querían 3 mil 500 dólares de rescate por cada uno. De lo contrario, les extraerían sus órganos para completar el dinero. Sus familiares pagaron, mas no lo soltaron. Tuvo que escaparse después de treinta y tres días de cautiverio en una bodega donde permanecían en condiciones insalubres. Asimismo, presenció la muerte por golpes de varias personas, con una tabla y con armas de fuego. Agregó que en la bodega había hombres, mujeres, niños, ancianos, mujeres embarazadas y enfermos.

Un hondureño más fue secuestrado junto con doscientos migrantes, centroamericanos y brasileños. Estuvo preso cincuenta y dos días, al cabo de los cuales fue puesto en libertad cerca de la Casa del Migrante en Reynosa, Tamaulipas.

Una mujer originaria de Honduras fue trasladada a un granero en donde había cuatrocientas personas secuestradas, en espera de que sus familias enviaran los 3 mil 500 dólares exigidos por el comando armado que los privó de su libertad.

*****

Los ciento treinta migrantes guatemaltecos que fueron levantados por doce personas que usaban máscaras y uniforme militares en Tenosique, Tabasco, no tuvieron suerte. Sus plagiarios exigieron 7 mil dólares por persona. Fueron pocos los que pudieron pagar. Eran amenazados continuamente con una sierra, taladros y cuchillos.

“Allí nos tuvieron encerrados en la casa. Casi un mes. No nos daban comunicación ni con los familiares ni con nadie. Después de un mes nos dicen: Les vamos a dar las llamadas para que ustedes llamen a sus familiares y les digan cuánto les cobramos. A nosotros nos dijeron: “si no pagan 7 mil dólares, se les llama a los familiares para que los escuchen hablar por última vez”.

“Cuando llegamos a Coatzacoalcos, nos dijeron: Bienvenidos al infierno”.

Si tú no le decías a tu familiar que te maltrataban, ahí te rompían la cabeza”.

-¿Qué le hicieron cuando usted estaba hablando por teléfono?

-Me golpeaban, me daban cachetadas. Ahí matan gente, delante de todos matan. Ahí, en esa casa, el otro día mataron como a cinco.

-¿Usted vio que mataron a cinco?

-Sí.

-¿Cómo los mataron?

-Los mataron a puro golpe.

*****

-¿Cuánto vale un rescate? –le pregunté a Mauricio Farah Gebara.

-En promedio, 2 mil 500 dólares. Pero a veces basta con 100 –repuso.

Lo escucho:

“Algunos agentes del Instituto Nacional de Migración, junto con policías municipales, estatales y federales, más el ministerio público, administran el delito y la impunidad.

“Los números de las víctimas crecen, más allá de las denuncias categóricas que hemos formulado públicamente y de las instancias elevadas a las máximas autoridades del país. Nuestra frontera sur está teñida de rojo”.

-¿Qué es administrar el delito? –pregunto al quinto visitador de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.

-Inmovilizar la ley. Que el delito corra.

*Tomado del libro Secuestrados, de Julio Scherer García, editado en agosto de 2009 por Grijalbo.

viernes, 27 de agosto de 2010

Organizaciones exigen respeto y justicia para migrantes

COMUNICADO DE PRENSA
26 de agosto de 2010

ORGANIZACIONES E INSTANCIAS DE GUATEMALA, HONDURAS, EL SALVADOR, NICARAGUA, COSTA RICA, ARGENTINA, COLOMBIA, ESTADOS UNIDOS Y MÉXICO EXIGEN RESPETO Y JUSTICIA PARA PERSONAS MIGRANTES

En el marco del II Encuentro Regional de Migraciones “Articulando la defensa de derechos humanos de migrantes de manera integral” en donde organizaciones e instancias de Guatemala, Honduras, El Salvador, Nicaragua, Costa Rica, Argentina, Colombia, Estados Unidos y México, hemos analizado la situación que viven día a día las personas migrantes y sus familias, así como personas defensoras de derechos humanos en la región, repudiamos enérgicamente la reciente masacre perpetrada en contra de 72 migrantes en el municipio de San Fernando, Tamaulipas, en un contexto en el que el crimen organizado actúa de manera impune ante una ciudadanía indefensa y un gobierno insensible.

Un ejemplo más de lo anterior lo es el incremento de las desapariciones de migrantes en territorio mexicano, y la falta de voluntad política de los tres niveles de gobierno para el establecimiento de mecanismos de registro y de investigación del paradero de cerca de cientos de migrantes.

Otra situación que preocupa no sólo a las organizaciones e instancias firmantes, es el uso de términos que denigran la dignidad humana, discriminan a las personas migrantes y ubican su presencia como una amenaza para la comunidad receptora y de tránsito, tales como: “ilegales”, “centroamericanos mareros”, “portadores de enfermedades”, “delincuentes”, entre otros. Esto, en lugar de promover una cultura de paz, de respeto y tolerancia a la multiculturalidad, contribuye a que actos de discriminación y violencia sean invisibilizados y normalizados por la sociedad en general.

Por ello vemos con preocupación que las violaciones a derechos humanos contra migrantes lejos de disminuir, continúan siendo una práctica constante y en crecimiento, entre otras cosas, gracias a la ausencia de una política migratoria de atención integral y a la permanencia de disposiciones y programas que promueven abusos, y violencia hacia las ciudadanos y ciudadanas migrantes.

En esta tesitura, estamos convencidas que el trabajo que personas, grupos e inclusive cuerpos diplomáticos realizan en favor de la población migrante contribuye a la defensa y promoción de prerrogativas fundamentales de esta población. No obstante, consideramos que no existe protección adecuada para esta labor. Por el contrario, se ha podido documentar que acciones de deslegitimización y hostigamiento continúan en contra de defensores de derechos humanos, a pesar de que algunos de ellos cuentan con medidas cautelares otorgadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

Finalmente reconocemos los esfuerzos emprendidos por algunos países para fortalecer la protección consular en países de tránsito y destino de personas migrantes, sin embargo esta debe incrementarse y ser más eficiente debido al contexto de violencia, marginación y discriminación al que muchos de sus connacionales se enfrentan de manera cotidiana, colocándolas en una situación de grave vulnerabilidad.

Por ello, exigimos

Al gobierno de México,

Sin demora, llevar ante la justicia y castigar a los verdaderos responsables de la reciente masacre de migrantes en Tamaulipas. Tanto actores intelectuales y materiales, como autoridades que por comisión u omisión han permitido actuar libremente al crimen organizado.
Emprender acciones contundentes para que el tránsito de personas migrantes por territorio mexicano sea seguro, protegiéndolos de todo acto de violencia, abuso o delito, especialmente el secuestro. Y en su caso brindarles pleno acceso a la impartición de justicia.
Prevenir y detener las violaciones sistemáticas de derechos humanos en contra de la población migrante en territorio mexicano.
Agilizar los procedimientos de respuesta de peticiones realizadas por familiares de migrantes fallecidos o desaparecidos.
Promover, respetar y fomentar la labor de defensa integral de los derechos humanos de la población migrante, sea realizada por sociedad civil o por personal diplomáticos,
Fomentar una comunicación mediática con un enfoque de respeto a los derechos humanos

A los gobiernos de Centroamérica

Emprender acciones conjuntas y contundentes que atiendan el tema migratorio desde una perspectiva de derechos humanos considerando las causas y consecuencias estructurales de la migración,

Las instancias firmantes estamos convencidas que las acciones de los distintos gobiernos en la región, lejos de beneficiar a la población y de respetar derechos fundamentales, promueven la criminalización, violencia, discriminación y abusos cometidos en contra de esta población, todo esto en un marco de impunidad y discrecionalidad de las autoridades.

Finalmente les recordamos las obligaciones contraídas a través de la ratificación de instrumentos internacionales y regionales de protección a los derechos humanos.

Comité de Familiares de Migrantes Fallecidos y Desaparecidos de El Salvador –COFAMIDE-
Red para las Migraciones de El Salvador –REDMIGRES –
Centro Feminista Mujer, Información y Acción –CEFEMINA-
Centro de Derechos Sociales de la Persona Migrante –CENDEROS –
Hermana Ma. Genoveva Ochoa Castrejón “Tja Qya“ Casa de la Mujer Hermanas Oblatas del Santísimo Redentor -Guatemala.
Instituto de Derechos Humanos de la Universidad Centroamericana “José Simeón Cañas” –IDHUCA- El Salvador
Caritas El Salvador, Diócesis de San Miguel, El Salvador
Mujeres Transformando El Mundo, Guatemala
Foro Nacional para las Migraciones en Honduras –FONAMIH-
Mesa Transfronteriza Migración y Género, Huehuetenango, Guatemala – Chiapas México
Comité de Derechos Humanos de Tabasco –CODEHUTAB
Comité de Derechos Humanos Fray Pedro Lorenzo de la Nada A.C. Ocosingo, Chiapas, México.
Centro de Derechos de la Mujer de Chiapas, Comitán, Chiapas México.
Centro de Derechos del Migrante A.C. Ciudad Juárez, México
Centro de Investigaciones Económicas y Políticas de Acción Comunitaria. CIEPAC
Colectivo ANSUR, Colombia
Centro Pastoral de Atención al Migrante y Casa del Migrante, Ciudad de Guatemala
Casa Alianza de Honduras.
Equipo de Estudios Comunitarios Acción Psicosocial –ECAP – Guatemala.
Global Workers Justice Alliance
Asociación Red Comités de Migrantes y Familiares de Honduras –RED COMIFAH-
Pastoral de Movilidad Humana, Conferencia Episcopal de Guatemala.
Instituto Centroamericano de Estudios Sociales y Desarrollo –INCEDES – Guatemala
Casa del Migrante de Tecún Uman San Marcos, Guatemala
Mesa Nacional para las Migraciones en Guatemala –MENAMIG-
Consejería en Proyectos para Refugiados Latinoamericanos
Centro de Derechos Humanos Fray Matías de Córdova, A.C. Tapachula, Chiapas, México
Casa del Migrante de Saltillo, México
Albergue Hermanos del Camino en Ixtepec Ixtepec, México
IDHEAS Litigo Estratégico en Derechos Humanos A.C.
Centro de Derechos Humanos de la Universidad de Lanus, Buenos Aires, Argentina
Servicio Jesuita a Migrantes, México

Tapachula, Chiapas, a 26 de agosto de 2010.

La Masacre a los 72 migrantes es una irresponsabilidad del Estado mexicano en materia de derechos humanos

Saltillo, Coahuila a 26 de agosto del 2010

Ante la masacre de cincuenta y cuatro hombres y catorce mujeres migrantes ocurrida en días pasados en el municipio de San Fernando, Tamaulipas, la Casa del Migrante de Saltillo condena abiertamente los hechos sucedidos y manifiesta lo siguiente:

-    Que éste no es un hecho aislado, sino que corresponde a todo un escenario de persecución y muerte, en el que las personas migrantes sufren la condición de invisibilidad a la que los condena la política migratoria actual. En este sentido:

o    Reprobamos la declaración del gobierno federal en la que se manifestó que esta masacre corresponde a pugnas libradas entre grupos del crimen organizado.
o    Condenamos la falta de voluntad del Instituto Nacional de Migración para aceptar la realidad de sistemática violación de derechos humanos de las personas migrantes y decir, como lo ha expresado, que únicamente se han registrado en el año “seis o siete eventos de secuestro”.
o    Consideramos totalmente insuficientes las palabras de condolencia de la Secretaría de Relaciones Exteriores ante un acontecimiento tan significativo de holocausto contra personas de países latinoamericanos

-    Esta masacre es una muestra clara de que la política migratoria actual del Estado mexicano no sólo no garantiza los derechos humanos de las personas migrantes, sino que propicia y permite que se cometan estos delitos, teniendo como consecuencia que esta dolorosa migración de supervivencia deje de tener esperanza y futuro para estos pueblos empobrecidos.

-    Este acontecimiento no sólo pone en crisis la política migratoria del Estado mexicano, sino que le exige una revisión profunda que la lleve a ser corresponsable con la defensa de los derechos humanos y los compromisos internacionales asumidos por México

-    Por otra parte, destacamos que este acto respalda los testimonios de numerosas víctimas, quienes expresan que grupos del crimen organizado reclutan a migrantes con fines de explotación laboral y sexual, así como para utilizarlas en fines ilícitos. Asimismo, es muestra irrefutable de la sistemática violencia ejercida en contra de las y los migrantes sin documentos a lo largo de todo el territorio nacional, vivida con mayor crueldad en la región noreste del país.

-    En este sentido, en repetidas ocasiones hemos denunciado que Coahuila no está exenta de estos graves hechos. Por lo tanto, hacemos un llamado a las autoridades estatales y municipales para que, de una sola vez, erradiquen todas aquellas condiciones de inseguridad que conllevan a que este tipo de delitos y verdaderas masacres, se cometan en completa impunidad.

-    Ante la grave problemática, es urgente que el Estado mexicano acepte colaborar con las demandas de los estados centro y sudamericanos, de tal manera que pueda llegar al fondo de las investigaciones y a la justicia y compensación a las innumerables víctimas y a sus familias. Asimismo, es necesario que los gobiernos de Centroamérica fijen una postura concreta de defensa y protección de los derechos humanos de sus connacionales en tránsito por México.


BELÉN, POSADA DEL MIGRANTE
FRONTERA CON JUSTICIA, A. C.
HUMANIDAD SIN FRONTERAS, A. C.
CENTRO DIOCESANO PARA LOS DERECHOS HUMANOS
FRAY JUAN DE LARIOS
DIÓCESIS DE SALTILLO

miércoles, 18 de agosto de 2010

Los obispos que odian a los gays

Jenaro Villamil


MÉXICO, D.F, 17 de agosto (apro).- Parafraseando a Carlos Monsiváis, a los obispos de la Iglesia Católica mexicana les está sucediendo algo que nunca previeron: o no entienden lo que está pasando o ya pasó lo que habían entendido. Hace dos décadas era inimaginable en un país de fuerte tradición católica que existiera una discusión como la que se dio en estos días en la Suprema Corte de Justicia de la Nación para avalar la constitucionalidad de las parejas del mismo sexo, de sus derechos similares a los del contrato matrimonial y de la posibilidad de adoptar hijos.

          Ante la contundente derrota jurídica –ayer nueve de los 11 ministros respaldaron la constitucionalidad de la adopción por parte de matrimonios lésbicos o gays--, la reacción de los obispos fue furibunda. No defienden sus creencias, sino exhiben sus prejuicios. No muestran caridad alguna, sino una homofobia cerril. No argumentan, simplemente acusan sin prueba alguna. No tratan de convencer, sino de intimidar con un infierno que sólo existe en su mala conciencia.

          Las palabras del cardenal Juan Sandoval Iñiguez lo retratan de cuerpo entero: “Los ministros de la Corte fueron maiceados por Marcelo Ebrard para avalar la adopción de menores por parte de matrimonios del mismo sexo”. Es decir, para él debatir sobre la constitucionalidad de los derechos de parejas gays o lésbicas no es una discusión jurídica, sino un acto de corrupción, que le ha valido un emplazamiento por parte de las autoridades del Distrito Federal y una censura de los ministros de la Suprema Corte.

          “No sé si a alguno de ustedes les gustaría que lo adoptaran un par de lesbianas o un par de maricones. Creo que no”, abundó con tono apocalíptico. ¿Acaso ignora el señor Sandoval que la mayoría de las personas con orientación homosexual, lésbica, bisexual o transgénero se formaron en hogares heterosexuales? ¿Será que su examigo Marcial Maciel, fundador de los Legionarios de Cristo se dedicó a abusar menores y a tener prácticas homosexuales o bisexuales porque fue adoptado por un par “de maricones” como le gusta decir con toda la carga de discriminación? Aquí no hay argumentos; simplemente la exhibición de una gran ignorancia que se encubre en una pobreza de lenguaje extrema.

           Pero la imaginación de don Sandoval Iñiguez es ilimitada: “No es natural, claro que no. Imagínate a la pobre criatura que esté allí: ¿a quién le dice papá y a quién le dice mamá? Cuando los vea en sus prácticas, pues él también se va a pervertir, va a seguir ese camino”. Supone el cardenal de Jalisco que todos los niños son vouyeristas. ¿Qué habrá sucedido con las personas gays o lesbianas? ¿Será que se escondían en un clóset y no entendieron cuáles son las “prácticas naturales”?

          Para hacerle segunda, el vocero de la Arquidiócesis de México, Hugo Valdemar fue un poco más astuto. Su homofobia se disfrazó con una comparación al crimen organizado, como si ambos formaran parte de peligrosos cárteles de la inmoralidad.

          “El (Marcelo Ebrard) y su gobierno han creado leyes destructivas de la familia, que hacen un daño peor que el narcotráfico. Marcelo Ebrard y su partido, el PRD, se han empeñado en destruirnos”, afirmó Valdemar.

           El vocero del cardenal Norberto Rivera, quien por ahora ha guardado silencio público, hizo la siguiente reflexión frente al debate de los ministros:

“La Suprema Corte está para hacer justicia y tal parece que no cumplió con su labor, porque debió haber prevalecido el bien superior del niño, que tiene derecho a tener un padre y una madre, y no el supuesto derecho de estas parejas de poder adoptar”.

           Justamente fue la preocupación por el bienestar de los infantes lo que motivó a varios ministros a tener una posición muy distinta a los prejuicios de quienes, por cierto, administran orfanatos y nadie los ha acusado de “antinaturales”.

          La ministra Margarita Luna Ramos lo dijo con contundencia: “El problema de la adopción no es un problema de género, sino de personas idóneas para la integración de los menores”. Incluso, la ministra advirtió sobre los posibles fenómenos de discriminación en las escuelas, pero fue más optimista que apocalíptica:

          “Puede haber cierto rechazo para alguno de los niños, no lo podemos dejar de reconocer, pero estos son fenómenos de transición que tienen que darse dentro de nuestra sociedad y son precisamente producto de su misma evolución, y toda evolución tiene un comienzo que se da por lo regular a través de una ley que reconozca una realidad”.

           Esta es la realidad que no quieren admitir los jerarcas católicos: sectores crecientes de la sociedad han cambiado de una manera contraria al dogmatismo de El Vaticano en materia sexual. Cada vez hay mayor aceptación y apoyo a aquellas familias formadas sólo por la madre o por el padre, y existen parejas del mismo sexo que funcionan igual o mejor que los modelos heterosexuales. Su preocupación no es la orientación sexual, sino el reconocimiento de sus derechos civiles.

           Al día siguiente de la votación de la Suprema Corte, la Conferencia del Episcopado Mexicano emitió un comunicado para respaldar a Sandoval Iñiguez y al vocero de Norberto Rivera. Para el organismo que aglutina a los más de 100 obispos mexicanos, existe “intolerancia” ante las opiniones de los ministros católicos.

          Los obispos ven la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio. ¿Avala la CEM las afirmaciones de Sandoval? ¿Realmente creen que expandir los derechos civiles en el Distrito Federal es más peligroso que el narcotráfico? ¿Cuántas fosas comunes morales se requieren para mandar al infierno a quienes no piensan como ellos?

          La jerarquía está enferma de odio. Y ese es el principal problema frente a un debate jurídico y moral como el que se ha generado. Nadie discute el derecho de los creyentes católicos a estar en contra de las parejas del mismo sexo y su posibilidad de adopción. Lo que se discute es que ellos no tienen ni la autoridad civil ni la credibilidad social para imponer sus criterios y su uniformidad moral a todos hombres y mujeres que viven de forma diversa, por minoritarios que sean.

Los obispos que odian a los gays

Plegaria de los huérfanos

Nosotros, Señor, los niños huérfanos y las niñas huérfanas de México te rogamos:

Déjanos gozar la plenitud de nuestra orfandad.

Nuestros padres murieron porque fue tu Voluntad. Nuestros padres nos abandonaron porque fue tu Voluntad. Porque Tú así lo quisiste, nuestras madres fueron violadas por desconocidos a los que nunca volvieron a ver, y ellas nos arrojaron a un basurero o nos dejaron a las puertas de un Templo.

Déjanos, Señor, honrar tu Divina Voluntad.

Es nuestro privilegio.

No nos entregues a la adopción de parejas del mismo sexo. Por mucho amor que piensen darnos.

Por mucho amor que, de verdad, nos den.

Preferimos el desamor del abandono.

Preferimos el desamor de la indiferencia.

Es nuestro privilegio.

Preferimos, a tener dos padres amorosos o dos madres amorosas, vivir como vinimos a este mundo: sin un solo padre, sin una sola madre. Preferimos, a tener el amor toda la vida de dos hombres o dos mujeres de buenas intenciones y buena alma, no tener el amor de nadie desde siempre y para siempre.

Preferimos el desamor de la orfandad.

Déjanos, Señor, la libertad de vivir como huérfanos en un orfanatorio. De vestir como huérfanos, el uniforme del orfanatorio. De comer, como huérfanos, la miserable comida del orfanatorio. De dormir, como huérfanos, en los multitudinarios dormitorios de los orfanatorios. Déjanos, Señor, que cuando lleguemos a los albores de nuestra adolescencia nos echen a la calle, como a todos los huérfanos, del orfanatorio.

Es nuestro privilegio.

Así honramos tu Divina Voluntad.

Déjanos, Señor, quedarnos sin estudios, crecer sin moral y sin religión, sin nadie a quien aprendamos a amar, sin nadie que nos enseñe a amarte.

Déjanos ser niños de la calle, hombres de la calle, mujeres de la calle.

Déjanos disfrazarnos de payasos y malabaristas para malganarnos la vida en las esquinas.

Déjanos ser franeleros toda la vida. Déjanos ser mendigos.

Es nuestro privilegio.

Déjanos dedicarnos a limpiar los parabrisas de los automóviles.

Déjanos ser presa fácil del crimen y de la droga, del alcohol.

Déjanos ser criminales. Déjanos ser ladrones y narcos.

Déjanos caer muertos a los veinte años de una sobredosis.

Déjanos morir de hambre en un callejón, déjanos ser asesinados en la flor de nuestra juventud.

Déjanos vivir parte de nuestra orfandad en las cárceles.

Es nuestro privilegio.

Danos la oportunidad, como se la diste a nuestros padres biológicos, de fundar hogares que podamos destruir para poder tener hijos que, con su orfandad, sean el espejo de la orfandad de sus padres y de sus madres, de su crueldad, de su irresponsabilidad, de su desapego.

Déjanos, Señor, prostituirnos a los doce, a los trece, a los catorce años.

Déjanos, Señor, ser las putitas y los putitos de los proxenetas.

Déjanos, Señor, ser pasto de los pederastas en las escuelas, en tus templos.

Pero no nos des por guía a dos mujeres, o a dos hombres, aunque todos sean, como nosotros, tus hijos, y todos, como nosotros, seres humanos. Por mucho amor que nos prometan. Por mucho amor que nos tengan. Y así nos colmen con alegrías y comprensión. Así nos dignifiquen como pobres criaturas de Dios y por mucho amor que tengan a ti mismo. No merecen nuestro amor recíproco porque no merecen, siquiera, el tuyo.

Preferimos el desamor de la ausencia. Preferimos el desamor del olvido.

Pero si es tu Divina Voluntad, Señor, darnos un hogar y arrancarnos así el privilegio de no haberlo tenido, Señor, haz que las buenas familias cristianas de México que ya tienen hijos, nos adopten; haz que todas las parejas sin hijos de México, nos adopten. A todos, Señor. Cualquiera sea el color de nuestra piel. Así seamos blancos o indios, negros. Así estemos ciegos, o cojos, o mudos. Tú, si te lo propones, Señor, puedes hacerlo.

Diles a esas buenas familias cristianas que así aliviarán sus conciencias: evitándonos ser adoptados por parejas del mismo sexo.

No nos des dos padres o dos madres, Señor. Tú nos diste el frío de la ciudad y el silencio de la noche: los preferimos al calor de sus hogares y a la dulzura de sus palabras.

Y si nada de esto puedes hacer porque no lo quieres hacer, porque tu Divina y misteriosa e inescrutable Divina Voluntad se impone a tu Divina Omnipotencia, Señor, déjanos tranquilos.

Déjanos, así como nacimos parias, ser parias toda la vida para salvaguardar tu Voluntad. Déjanos crecer desprotegidos en el desamor de la intemperie, en la periferia de la sociedad, en el vacío del rechazo y el desdén.

Déjanos Tú, tú, el Señor sin cuya voluntad no se mueve la hoja de un árbol, déjanos, Señor, que como hojas nos arrastre el viento de la soledad y la derelicción.

Es nuestro privilegio: somos los privilegiados de la Tierra porque sabemos que, gracias a tu infinita Misericordia, le has prometido, a aquellos que en esta vida habitan un infierno, que en la otra vida serán ciudadanos del Reino de los Cielos.

Gracias, Señor.

Fernando del Paso

martes, 17 de agosto de 2010

La Historia del Agua Embotellada



Si quieres subtitulos en español, ve a Youtube y marca CC

sábado, 14 de agosto de 2010

Guardianes de los alimentos

Guardianes de los alimentos

Las crisis financiera, energética, ambiental, climática, tecnológica, jurídica y alimentaria se potencian. Las grandes corporaciones se posicionan en todos los segmentos de la cadena alimentaria e instauran un llamado “sistema alimentario global”: acaparan tierra y semillas, fabrican insumos, cosechan, cultivan, almacenan, procesan, transportan y transforman comercializando finalmente al menudeo alimentos empacados o listos para servirse. A nivel oficial, insisten en que por primera vez la mitad del mundo vive en las urbes y pronto, con la ayuda de organismos internacionales, habrá un 75 por ciento urbano.

En un momento así, y cuando los falsos remedios intentan perpetuar que las grandes corporaciones sigan haciendo negocios pase lo que pase, es ilustrativo un documento del Grupo ETC que formula una cuestión vital: quién habrá de alimentarnos, quiénes en verdad son los guardianes de los alimentos en el mundo. La respuesta es sorpresivamente esperanzadora. Pese a que en los censos los indígenas y los campesinos están subestimados o escondidos en categorizaciones académicas o políticas que no los representan, por lo menos 1 500 millones de personas (en el más conservador escenario) producen sus propios alimentos, guardan e intercambian semillas nativas desde tiempos inmemoriales.

Cerca de un 85 por ciento de los alimentos producidos se consumen en la misma región ecológica, fuera del llamado “sistema alimentario mundial”, lo que significa que el mundo se alimenta de los campesinos independientes.

Esto, si consideramos únicamente a los agricultores más visibles. Aquellos que producen sus propios alimentos pueden sumar los 3 mil millones si se incluye a campesinos cultivadores (muchos de ellos indígenas), pastores (sedentarios y nómadas), productores pecuarios campesinos, cazadores, pescadores artesanales, recolectores y cosechadores de agua. El recuento es difícil porque varias de esas actividades son laboradas conjuntamente por el mismo núcleo de personas, familias o comunidades en diversas temporadas y sin que sean visibles estas actividades cotidianas.

Se podría incluir a unos 800 millones de personas que cultivan sus propios alimentos en las ciudades (azoteas, patios, huertos y terrenos comunitarios urbanos), pero de nuevo, es difusa la cuenta porque muchos van y vienen entre el campo y la ciudad.

Si este enorme grupo de personas y comunidades alimenta al mundo pese a la poca tierra con que cuenta (por eso exige a nivel mundial una urgente reforma agraria integral y un alto al acaparamiento corporativo), ¿por qué no aparece en la percepción general? ¿Por qué las políticas públicas internacionales y nacionales, las grandes iniciativas como la Revolución Verde y ahora AGRA, se empeñan en desacreditar a los campesinos, y criminalizar sus semillas nativas y saberes con leyes que atentan contra 10 mil años de agricultura campesina?

Al sistema alimentario mundial le es indispensable “terminar con la producción independiente de alimentos, terminar con las semillas independientes no controladas por las grandes corporaciones y la posibilidad de autonomía de las comunidades”.

Hacerlo implica leyes y políticas nocivas y un control difícil de implementar cuando millones de personas no quieren pedir permiso para ser quienes son y producir alimentos resistiendo en las márgenes del sistema. Dice Camila Montecinos: “Si la comida que producen los pueblos campesinos e indígenas fuese marginal, no se necesitarían estas leyes, dejarían que las comunidades campesinas e indígenas murieran por sí solas. La intensidad del ataque tiene que ver con la importancia de lo que todavía mantienen en sus manos las comunidades. Hoy es más importante que nunca mantener las semillas propias y los sistemas colectivos que permiten que esa semilla se mantenga viva y caminando”.

Ojarasca

Ver Grupo ETC, “Quién nos alimentará”, www.etcgroup.org, y GRAIN, “Leyes para acabar con la agricultura independiente”, Biodiversidad, sustento y culturas, número 64, abril de 2010.

Cumpleaños 84 de Fidel: Muchas razones a defender

viernes, 13 de agosto de 2010

Noveno Aniversario de Radialistas Apasionadas y Apasionados

Hola Amigas y Amigos de Radialistas

Felicitaciones por estas nueve vueltas a la fuente de energía de todo lo que existe en este redondo mundo, poniendo su aporte para hacerlo un mundo muy otro, justo e inclusivo, han sido nueve años andados, hablados, oidos y enlazando otras muchas experiencias radiales, en esta Nuestra América.

Que en esta decima vuelta que inician, les encuentre con las mayores ganas y animos de seguir siendo parte de las muchas radios que les hemos hecho parte de nuestra familia.

Un abrazo fuerte a todas y todos ustedes desde Frecuencia Libre 99.1 en San Cristóbal de Las Casas, Chiapas.

http://www.radialistas.net/clip.php?id=1900130

http://www.radialistas.net/index.php

jueves, 12 de agosto de 2010

Huesos desnudos




(Una carta de Eric Domergue a su hermano Yves, secuestrado y desaparecido durante la dictadura a los 22 años, leída ayer en la Iglesia de la Santa Cruz)

Veo tus huesos desnudos. Huesos perforados, delicadamente ordenados en una mesada.
Te miro y te reconozco.
Veo tus huesos desnudos, recorro tus miembros delgados, no quiero que tomes frío... entonces te arropo.
Te arropo con tu primer grito en una clínica de París a la hora de la siesta del verano del ’54.
Te arropo con la sal del ancho mar que nos transportó a tierras desconocidas y argentinas.
Te arropo con la ascendencia que siempre te confirió ser el mayor de nueve hermanos.
Te arropo con aquel pulóver rojo igualito a mi pulóver rojo y al pulóver rojo de nuestra única hermana mujer tejido con incansables manos de madre.
Te arropo con el corte de flequillo recto y nuca tapada, especialidad paterna para tus hijos varones.
Te arropo de cowboy y de tus furibundos ataques con disparos de cebita, persiguiéndome entre los maltratados malvones del jardín. Por fortuna, siempre corrí más ligero que vos.
Te arropo con tu camiseta blanca cruzada por una banda roja, disputando el mismo balón de cuero número cinco, yo con los colores de Boca bien pegados al pecho.
Te arropo de uniforme escolar, de monaguillo, de mochilero, de apasionado por los números, de inquieto estudiante universitario, de naciente militante revolucionario.
Te arropo con las canciones de Daniel Viglietti para juntos volver a entonar la cubana “Canción del elegido”, esa que dice “Lo más terrible se aprende enseguida y lo hermoso nos cuesta la vida”.
Te arropo para nuestros encuentros furtivos cuando el país ya era una gran trampa y vos un clandestino más.
Te arropo con tu único saco rústico, azul, gastado, y con tu postrera y ojerosa sonrisa frente al objetivo en el invierno del ’76.
Te arropo y vuelvo a devestirte de galante amante de Cristina, tu compañera.
Te arropo con los plomos que te apagaron y ahora se vuelven contra quienes te quisieron ocultar por siempre.
Te arropo con los yuyos y las moscas de Carreras, con la tierra de Melincué que abonaste con tu carne dolida, con las flores sobre tu tumba posadas por manos desconocidas para muertos desconocidos.
Te arropo con los guardapolvos blancos de niños y docentes empecinados en ponerles nombres a los habitantes más anónimos del paraje.
Te arropo con seis gotas de mi sangre para que tus huesos y mi plasma se fundan en un mismo e irrefutable ADN.
Te arropo con la mano amiga de quienes te encontraron, te desenterraron, te cuidaron, te devolvieron una identidad y una familia.
Te arropo, te vuelvo a desvestir y te llevo conmigo.
Hermano, amigo, compañero.
Partamos en busca de más huesos desnudos, que quedan tantos por hallar

miércoles, 11 de agosto de 2010

El narco, la excusa de Calderón

Álvaro Delgado
 
MÉXICO, DF, 9 de agosto (apro).- ¿Por qué Felipe Calderón se aferra a una guerra que es un fiasco y cuya fase de narcoterrorismo multiplicará las víctimas civiles? Muy fácil: Porque le sirve para ocultar el contundente fracaso de su gestión en absolutamente todo.

         La paz no conviene a Calderón, porque transparenta su incompetencia y la magnitud de su engaño que sigue hundiendo a la nación.

         Y su guerra, la guerra que pretende que la sociedad legitime, al mismo tiempo que le crea la falsa imagen de valentía, una de sus tantas imposturas, le es útil para intimidar y reprimir cualquier síntoma de descontento social.

Sólo en tres rubros, igualmente macabros, Calderón ha mostrado capacidad de producción: Los asesinatos, los pobres y los impuestos.

         En el primero, la propia cifra oficial --que seguramente está maquillada-- es escalofriante: Más de 28 mil asesinatos en tres años y medio de una “guerra” que nadie le pidió, entre ellos miles de inocentes cuya cantidad precisa está oculta.

         En el segundo rubro, el ascenso es igualmente criminal por su costo social: Casi 6 millones de mexicanos han sido lanzados por Calderón al infierno de la pobreza que padecen otros 50 millones, cuando falta todavía los mexicanos que resultados afectados por la crisis de 2009.

         (Hay que recordar que en su campaña prometió reducir 27 millones de pobres: De 50 a 35 millones los mexicanos pobres y de 22 millones a sólo diez los pobres extremos, como lo dejó por escrito en El hijo desobediente, el único libro que ha escrito. “Cuando asumí la presidencia de la República --expuso-- había unos 50 millones de pobres y 22 millones en pobreza extrema. Hoy (en 2012) hay 35 millones de pobres y 10 millones en pobreza extrema”.)
         Y sobre los impuestos, tampoco hay que olvidarlo: Este año se incrementó el IVA de 15 a 16%; el Impuesto sobre la Renta pasó de 28 a 30%; aumento de 2% a 3% en el impuesto a los depósitos en efectivo mayores a 15 mil pesos; se creó el impuesto de 4% a telecomunicaciones; se elevó también a 30% el impuesto a juegos y sorteos, y hasta se estrenó otro impuesto de 80 centavos por cajetilla de cigarros que se incrementará a 2 pesos en 4 años.

Pero, además, es permanente el alza mensual al gas doméstico y a la luz eléctrica, a raíz de la liquidación de Luz y Fuerza del Centro, y mensualmente se acumulan alzas al diesel y a las gasolinas.

Cabe preguntarse: ¿Para qué quiere más dinero Calderón? Lógicamente no para atender a la población más pobre que va en aumento, como se aprecia con las cifras citadas, sino para subsidiar el opulento tren de vida de la alta burocracia y el despilfarro en frivolidades como el “festejo” del Bicentenario de la Independencia.

         Pero el individuo que se ostenta como jefe del Ejecutivo y del Estado mexicano también exprime a los que pagamos impuestos para sostener el oneroso aparato de propaganda, que impide que los principales medios de comunicación, en particular radio y televisión, sea conocido y discutido el desastre nacional.

         Un dato: Calderón ya gastó, en tres años, 17 mil millones de pesos en difusión sólo del gobierno federal, la misma cantidad que Vicente Fox dilapidó con el mismo fin durante todo su sexenio.

          La mayor parte de este gasto publicitario se destinó a la televisión, a Televisa en particular, el emporio que ha arrancado lo que ha querido a Calderón --como lo hizo también con Fox--, como lo ejemplifica la entrega de la concesión de fibra óptica en sociedad con Nextel y que sólo pagará 16.5% de su valor.

         Así, ante el desastre social de su gobierno --que ha concentrado la riqueza en los mismos que lo impusieron y lo sostienen--, es lógico que Calderón insista en su “guerra” contra el narcotráfico, que fracasada y todo le sirve como coartada…

         Es preciso hacer dos puntualizaciones finales: Una, Calderón quiere hacer creer, taimadamente, que no cederá a los que quieren que no combata al crimen organizado. No. Sólo se le exige que lo haga bien.

Y dos, hay quienes plantean dejar de hablar de la violencia que atormenta la nación. Se equivocan. La casa se incendia y quieren jugar a las damas chinas...

 Apuntes

 La numerosa manifestación de periodistas, el sábado 7 de agosto, es una vigorosa muestra de la indignación del gremio ante la impunidad que afecta a todos los mexicanos y que es alentada desde las instituciones del Estado. Los pasos de los periodistas debieron dirigirse a la residencial oficial de Los Pinos, donde habita el representante formal de esas instituciones y no a la grisácea Secretaría de Gobernación. Sin un emplazamiento serio a la autoridad para que combata la impunidad, esclarezca y prevenga más crímenes, ni con un seguimiento puntual de ese eventual compromiso, esa indignación legítima del sábado se diluirá muy pronto…

Comentarios: delgado@proceso.com.mx
http://www.proceso.com.mx/rv/modHome/detalleExclusiva/82191

Hipócrita disculpa a Hiroshima

"Está claro que el ataque nuclear fue crimen de guerra, pero aceptarlo llega demasiado tarde"
Robert Fisk
The Independent

Al fin nos disculpamos por Hiroshima... más o menos. Reconocimos el sufrimiento que causaron nuestras bombas... o algo parecido. Obama lució sus credenciales antinucleares en las tierras que fueron el matadero de Hiroshima, pero eso no debe confundirse con pedir perdón.

La presencia de John Roos, embajador estadunidense en Japón, y del representante adjunto británico, David Fitton, fue una extraña aparición en el sitio del primer ataque atómico de la historia.

Contemplamos la ceremonia de los sobrevivientes y reconocimos su sufrimiento, muy al estilo de Tony Blair, y las palabras de nuestra embajada fueron tan falsas como las que pronunciaba el ex primer ministro. "Se trata del gesto adecuado en el momento preciso", quisimos decir. ¿El "gesto" de qué? Después de todo, en realidad no nos disculpamos por los 220 mil muertos de Hiroshima y Nagasaki. Diablos, ¿acaso no ganamos la Segunda Guerra Mundial?

El asunto es éste: si uno va a disculparse por asesinar a civiles, o en el último de los casos, por causar sus muertes, lo debe hacer con rapidez y por razones humanitarias. Esperar demasiado y hacerlo por motivos políticos arruina el efecto. Alemania se apresuró a admitir su responsabilidad por el Holocausto judío y ahora se proclama el mejor amigo de Israel en Europa. Turquía nunca se ha disculpado por el Holocausto armenio de 1915, pero si alguna vez lo hace, ¿le importará a alguien, además de los armenios?

A simple vista es muy sencillo. La mayoría de nosotros, al parecer, piensa que bombardear Hiroshima y Nagasaki fue un crimen de guerra. Yo estoy convencido. Los japoneses ya estaban por rendirse. El césar de los historiadores británicos, AJP Taylor, cita a un alto mando estadunidense: "La bomba simplemente tenía que usarse, ya se había gastado demasiado dinero en ella. De no haber sido así, ¿cómo justificar ese gasto enorme? Imagínense las protestas... El alivio que todos los implicados sintieron cuando la bomba acabó de construirse y se lanzó fue inmenso".

Atacar Hiroshima y Nagasaki evitó que los aliados ejecutaran una muy sangrienta invasión terrestre contra Japón, según una tesis que hoy suena a mentira. El almirante inglés Louis Mountbatten aseveró: "si la bomba mata japoneses y ahorra muertos en nuestras filas, desde luego estoy a favor de no matar innecesariamente a nuestros hombres. Soy responsable de tratar de matar a cuantos japoneses pueda. La guerra es una locura, pero lo sería aún más si sacrificáramos a nuestro bando por salvar japoneses".

Esta declaración evita cuidadosamente mencionar el hecho de que los soldados japoneses –si bien eran sádicos y brutales– mataban soldados, mientras los hombres de Mountbatten asesinaban a civiles japoneses. ¿Y cuándo va a disculparse Japón por Pearl Harbor?

Hay un asunto mucho más grave, dado que la mayoría de las víctimas eran civiles y fue un crimen de guerra casi de las dimensiones del Holocausto, al grado de que un historiador especialista se suicidó cuando cayó en la cuenta de ello: ¿por qué Japón no se ha disculpado por el asesinato y violación de tal vez un millón de pobladores de China en el ataque de Nanking, la capital de la China nacionalista antes de que "nuestra" Segunda Guerra Mundial estallara? En vista de esto y de Pearl Harbor, ¿por qué "tenemos" que ser los primeros en disculparnos y no los japoneses?

Cuando visité el santuario sintoísta para criminales de guerra, en Tokio, noté que entre peores eran los crímenes de los que ahí eran honrados, menos explicaciones en inglés había bajo sus retratos. Allí se resguarda una locomotora restaurada, la que tiró del primer ferrocarril que usó la vía férrea de Birmania (hoy Myanmar), llevando las cenizas de soldados japoneses muertos en batalla. Pero entre los constructores de esa vía estuvo el comandante de la marina real Jim Feather, que fue rescatado del buque Repulse, hundido por aviones japoneses en 1941, pero más tarde tomado prisionero, cuando cayó Singapur. Pese a estar herido y enfermo, se le obligó a trabajar en la construcción. Medía un metro 80 centímetros, pero en sus últimos días sus compañeros podían llevarlo en hombros como a un niño. Murió en algún momento de 1942. Jim era el hijo de Freda, la hermana de mi papá. ¿No merece la familia Fisk también una disculpa?

¿De qué serviría? En 1997, Tony Blair "reconoció" el sufrimiento de las víctimas irlandesas de la hambruna, y pudo haber dicho que que el gobierno británico no cuidó entonces de sus "propios" ciudadanos irlandeses. Nótese que no hubo disculpa, aunque la hambruna ocurrió casi 150 años antes.

Asimismo, los británicos esperaron casi 30 años para decir que lamentaban la matanza de 14 irlandeses desarmados a manos de paracaidistas ingleses durante el Domingo Sangriento. De haber dicho la verdad entonces –y admitir que habían disparado contra civiles inocentes– la guerra civil en Irlanda del Norte habría sido menos sangrienta y estarían vivos hombres, mujeres y niños que llevan largo tiempo muertos. Pero no: tuvimos que mentir y así ayudar al "sargento de reclutamiento" del Ejército Republicano Irlandés.

En cuanto a Hiroshima y Nagasaki, existe otro argumento bastante hipócrita. Nuestros enemigos del Eje habían bombardeado Pearl Harbor, Coventry y Belgrado, matado a judíos en Europa y a prisioneros de guerra en Asia: si alemanes y japoneses hubiesen tenido la bomba atómica ¿habrían vacilado en usarla contra "nosotros"? Además, ¿no es cierto que matamos a más alemanes al incendiar Colonia que en Hiroshima, con la bomba atómica? ¿Nos vamos a disculpar con los coloneses por eso?¿Que hay de la carnicería masiva cometida por la Real Fuerza Aérea en Hamburgo y Dresde?

Bueno, en cierta forma nos disculpamos por destruir la ciudad medieval en febrero de 1945, pues la cruz que corona la catedral restaurada fue hecha por el hijo de uno de los pilotos de Lancaster que bombardearon Dresde. Pero eso ocurrió tanto tiempo después del hecho que cuando la cruz fue colocada miles de neonazis modernos protestaron en torno de fosas comunes y afirmaban que el ejército de Gran Bretaña era el verdadero criminal de guerra.

Aún ahora, no tenemos la menor intención de disculparnos con los iraquíes por nuestra invasión ilegal en 2003. Hace unos días, el ministro laborista de las sombras, Ed Miliband, anunció, en lo que interpreté como una trampa antropológica, que "es tiempo de dejar eso atrás y avanzar", y más vale que no mencionemos el arrogante pronunciamiento de Blair ante la investigación de Chilcot.

Con todo, es fascinante recordar lo que en su momento se dijo de Hiroshima pues hoy podríamos decir las mismas palabras. "Esta absoluta violencia contra la humanidad no es guerra, ni siquiera es asesinato. Se trata de nihilismo puro". Podemos incluso quedar estupefactos ante un periódico que opinó que era posible legitimar el uso de la bomba atómica porque era imposible juzgar la moralidad del bombardeo a partir del tamaño que tenía la bomba que se usó. Por lo tanto, para dicho diario, la matanza fue "enteramente legítima".

La primera cita proviene de una estación de radio del imperio japonés en el Singapur ocupado. La segunda fue un argumento publicado en una edición de 1945 de un periódico que entonces se llamaba Manchester Guardian. Vale recordar la forma en que la poeta Vita Sackville-West reaccionó a Hiroshima. Su esposo, Harold Nicholson escribió en su diario que "Vita está encantada con la bomba atómica. Ella piensa que significa el principio de una nueva era..."

Bueno, de hecho lo fue, supongo. El periodista estadunidense John Hersey reveló el terrible sufrimiento de la gente de Hiroshima. A diferencia de Wikileaks, no intervinieron computadoras para obtener información, sino que fue a la ciudad para descubrir la verdad, y desde entonces el nombre de la localidad es un símbolo de culpa para la humanidad y con justa razón.

Esto obliga a preguntar si nuestros "crímenes" contra la humanidad prescriben o tienen fecha de caducidad. Blair ofreció su mediocre disculpa a los irlandeses siglo y medio después de que los británicos exportaron todos los alimentos de Irlanda en vez de alimentar a la población, lo que causó que hombres y mujeres fallecieran en las zanjas por tratar de alimentarse con hortigas espinosas.

Estadunidenses y australianos han ofrecido disculpas a sus pueblos originarios. ¿Pero qué hay de Cromwell (Inglaterra) y Drogheda (Irlanda)? ¿O la Guerra de los Treinta Años o la Guerra de Cien Años? ¿O el saqueo de Roma, el crimen de guerra de los godos (¡Pobre Angela Merkel!)? ¿O la destrucción de Cártago a manos de los romanos? ¿O la muerte de Jesús?

Supongo que la historia del imperio romano implica que Berlusconi tiene que disculparse, no obstante, muchísimos católicos pasaron siglos viviendo en su mundo antisemita y culpando de todo a los judíos. ¡Pobre Benjamin Netanyahu!

En general, este asunto de las disculpas es bastante tramposo. El teatro en Hirsoshima tuvo el objeto de enaltecer la imagen de un presidente cada vez más pagado de sí mismo, no porque exista verdadera preocupación por el sufrimiento, ni por el daño físico ni por el dolor humanitario. Puede decirse que fue un paso en la dirección correcta. Pero aún así fuera, llegó demasiado tarde.

© The Independent

Traducción: Gabriela Fonseca

Periódico La Jornada Miércoles 11 de agosto de 2010, p. 44

lunes, 9 de agosto de 2010

Emiliano Zapata

Emiliano Zapata Salazar nació el 8 de agosto de 1879 en San Miguel Anenecuilco, Morelos y falleció el 10 de abril de 1919 en Chinameca, Morelos. Conocido como el Caudillo del Sur, fue uno de los líderes militares más importantes durante la Revolución mexicana, comandó un importante ejército durante la revolución, el Ejército Libertador del Sur. 

http://es.wikipedia.org/wiki/Emiliano_Zapata

sábado, 7 de agosto de 2010

No derrotarán nuestra humanidad

Hiroshima y Nagasaki


A Fernando Michel
Por su indignada memoria que nos recuerda que la verdadera muerte es el olvido.


El día nació como de por sí nacen los días, la vida comenzaba con sus rutinas diarias, con esas pequeñas aventuras que son las vidas humanas, con esa gran aventura que es la vida toda, con el beso y la caricia que el afecto entrega. Preparar los alimentos que sustentan los afanes de cada quien, arreglar la gotera por donde curiosa se asomaba el agua, leer la historia donde las raíces están sembradas, tomar el aire, sentir la calida caricia que el sol regala, nada grande, nada importante, solo hacer la vida.

Sólo vivir, sin saber, sin imaginar que la muerte se acercaba con el sigilo de los cobardes, de los que saben que lo que harán los condenara eternamente, que serán eternamente condenados por el crimen que van a perpetrar.

En el cielo, viajando con gran cuidado, se acercan “Little Boy”, el Niño Pequeño, el Niñito, también “Fat Man”, el Hombre Gordo, el Barrigón, ambos con la más siniestra carga de muerte nunca pensada, la más niña de las muertes, la más obesa de las muertes.

Y de pronto, sin siquiera sentirlo, el cielo se ilumino como por un millón de soles y el peor de los infiernos jamás imaginado llegó.

Era tan incontable la luz que ya no hubo ojos por donde entrara y era tanto el calor que los cuerpos se enfriaron de vida.

La muerte descendió tan rápido que envolviendo los cuerpos, tan sólo la sombra de algunos quedaron para que de nuestra memoria jamás se fueran.

Hubo un estruendo como nunca se había conocido en el mundo, tan fuerte era que quienes lo comenzaron a escuchar ya no pudieron oírlo más, el silencio les había inundado.

Soplo un viento tan lleno de ira y calor que apago el aliento de la vida. Llego una luz tan intensamente blanca que ningún color volvió a existir.

De esa luz, de ese calor, de ese estruendo, de ese viento, se nació una monstruosa nube en donde cabalgó la muerte, llevando en la lluvia que lloraba, el odio y el desprecio que a sufrir condenaban.

Esta fue una muerte nueva, nunca en la vida del mundo se había conocido esta muerte. La inteligencia humana se unió con el más grande odio humano para estrenar la más espantosa de las muertes. Fue tan grande este odio humano, fue tan grande y obsceno su desprecio a la vida toda, que invento esta muerte tan matadora.

Este niñito que cometió la peor travesura jamás ocurrida, este gordo hombre que derramo su obesa muerte al mundo, nos llenaron de un dolor tan grande que no habrá nada que pueda quitarlo hasta que se acabe el tiempo, nos causaron tanto espanto que nuestros corazones no volverán a estar tranquilos, quemaron tan profundamente nuestra tierra que no existe algo que la pueda sanar, provocaron un silencio tan inmenso que nunca más podremos callar. Este gran odio y desprecio a la vida no pudieron, no podrán derrotar nuestra humanidad.  



Gabriel García Salyano, 06/08/06